Crónica al Perú: Iquitos-La selva peruana

Otro gran viaje que hicimos en Perú, fue el ir a la selva peruana, y como gran exponente de ésta es la ciudad de IQUITOS.

La ciudad de Iquitos se encuentra en la selva norte, al oriente del país. Es capital de la Región de Loreto, que con casi el 30% del territorio nacional es la mayor y más septentrional del Perú. La ciudad se halla a orillas de un brazo secundario del río Amazonas, frente a un gran blanco permanente llamado Padre Isla, boscoso y de casi veinte kilómetros de longitud. La ciudad está rodeada de un sin número de ríos y canales menores.

No me impresionó la ciudad, ya que como ciudad en sí, no llama la atención sino todo lo contrario, defrauda bastante, ya que se aprecia un bajo desarrollo de la ciudad, aspecto caótico, y todas las construcciones se asemejan a cuales invasiones de los cerros de lima, a parte de un trillón de motocicletas por las angostas y desastrosas calles de la ciudad.

Eso sí, el panorama cambia una vez que llegas al embarcadero con destino a cualquier lugar que hayas escogido para tus días en la selva. La situación cumple y con creces y diría yo que supera a lo conocido, cuando te vas adentrando poco a poco con la canoa, barquito, lancha, lo que sea por el majestuoso amazonas rumbo a tu destino.

Ya de por si, navegar por el amazonas es una experiencia indescriptible, rio (mar diría yo de lo grande y ancho que es o parece), lleno de lodo, marrón, pero bravo, caudaloso donde lo hayan, pero inmenso mires por donde lo mires. De recuerdo me traje una botellita de agua, para rememorar ese recuerdo que aún mantengo fresco en mi memoria.

Dependiendo tu destino, por lo general tienes varias opciones, nosotros escogimos ir a un Lodge dentro de la selva, aunque también tienes recorridos por la selva, deporte de aventura, acampada, y un largo etcétera.

Nuestro campamento base como decía se encontraba en un bonito lodge bastante adentro de la selva, al cual en la época de lluvia (como era el caso), se accedía sólo por canoa, donde la experiencia de llegar en canoa fue súper divertida.

En nuestro paquete incluía varias cosas interesantes, como varios adentradas a la selva, diurna y nocturna, ésta última muy interesante de hacer, ya que vas tipo explorador sin ver un palmo de tu cara, y sonando en tu oido un millón de mosquitos, y diferentes sonidos que no has escuchado en tu vida.

Otra de las actividades contratadas fue el ir a ver los delfines rosa, conocer lugares refugio y recuperación de animales salvajes (aqui toque por primera vez un perezoso!!), visitar aldeas originarias de la selva y conocer sus costumbres, y la actividad que mas me llamaba la atención y a la cual estaba contando las horas: cazar pirañas!!!

Amigos, cazar pirañas puede ser decepcionante o realmente impresionante no hay término medio, vivimos los dos casos, el primer día decepcionante porque no vimos ni una, acabándose toda la carnaza y yéndonos al lodge con las manos vacías; pero al día siguiente, alcanzamos la gloria.....pescamos pirañas.

Todo lo que se ha hablado sobre ellas y las leyendas al respecto, son ciertas amigos, si le pones un dedo cerca, te aseguro que se lo come. Aún cazada la que yo personalmente pesqué, ésta se seguía moviendo al cabo de un buen rato!!

Toda una experiencia el ir a la selva, el escuchar, oler, sentir, toda esa gran naturaleza viva en su máxima expresión valió la pena los días que allí estuvimos.

Cuéntanos tu experiencia al respecto!!

saludos